Elizabeth Silverio, la supuesta falsa neurocientífica infantil que tenía KOGLAND, un centro de terapia neurocognitivas y psicopedagógicas, el cual fue clausurado debido a que la comunicadora Nuria Piera la expuso al dar a conocer en varios videos investigativos que ella era un fraude porque tenía

certificados falsos y no estaba capacitada para tratar a niños con autismo, en vez de ocultarse, esos ataques sin puños sólo sirvieron para crear una mejor versión de ella, que a los 31 años, ha mejorado su imagen.

Elizabeth ya no es gorda, ahora se maquilla, trae el cabello largo y lacio y también está muy activa en Instagram, donde tiene una buena cantidad de seguidores y gente que la quiere, porque aunque nunca es bueno mentir, tampoco fue que mató a alguien. Ahí la podemos ver promocionar productos de los cuales recibe dinero, convirtiéndose automáticamente en influencer.

No se puede negar que es una mujer simpática con mucho carisma que habla castellano mejor que cualquier dominicano, y es por tener un excelente léxico que siempre fue muy convincente, al extremo de que nadie dudara de sus capacidades, que no dudo las tenga porque llega un momento que cuando estudiamos algo así no tengamos certificado, de tanto interesarnos e investigarlo, logramos adiestrarnos exitosamente.

Elizabeth también es pastora, y ha lanzado un libro titulado El Sistema Adámico, Las Ciencias del Edén, que pronto estará disponible en Amazon.

Si Nuria pensó que acabaría con Elizabeth, se equivocó.