Ser influencer no es trabajo fácil

Hace algunos años atrás nadie hubiera pensado que ser una influencer podría ser considerado como un trabajo, pero si lo es, crear contenido para YouTube, Instagram, TikTok y hasta Facebook, requiere de mucho esfuerzo y diario, el problema es que la gente se enfoca en el resultado final y no piensa en todo el trabajo detrás de cada vídeo y foto, hasta el video que parece más simple, requiere tiempo, investigación y edición. 

La mayoría de las influencers son muy criticadas por exponer sus vidas privadas, pero según los haters, este es el precio que deben pagar, ¿de verdad?

«Más allá de las sonrisas, el maquillaje, la luz del anillo y la cámara, hay un ser humano ansioso constantemente criticado y juzgado por extraños en línea. Un comentario, una página llena de odio, una persona puede enviarle un ataque de pánico en toda regla. Algunos días te elevas por encima y vascas en positividad y gratitud, algunos días la oscuridad se apodera de la luz y te consume. Estoy tan bendecida y agradecida por este trabajo. Pero eso no significa que sea a prueba de balas.»

Visita su Instagram.

Hablo de esto porque sigo a una youtuber, Alexandra, del canal Learning to be fearless, que tiene muchas haters que constantemente la atacan dejándole comentarios desagradables e hirientes, hasta existe un canal creado exclusivamente para burlarse de ella, esto a mi me parece que es porque tanto la tipa que creó el canal y las que comentan negativamente, la envidian. 

Alexandra puede mantenerse económicamente como youtuber y como influencer, y eso es algo que muchas quisieran, pero no pueden. 

Alexandra con esta foto expresó su sentir y lo difícil, aunque no aparente, que es ser una influencer, que a pesar de no ser el típico trabajo de 9 a 5, es un trabajo hasta más arduo porque debe siempre estar activa y creando contenido, además de lidiar con las críticas negativas.

La critican porque no suda cuando hace ejercicio, la acusan de sugar mamma, se inventan que su esposo no la quiere, que retoca mucho sus fotos, que es holgazana, que no le pone mucho esfuerzo a los vlogs… ¡Qué fastidiosa es la gente y que difícil es poder complacer a todo el mundo!

Si tienes tanta quejas de alguien, presiona unsuscribe o unfollow y ya, ¿para qué mortificarse?, pero no, el envidioso, el hater, nunca se va porque se alimenta de la vida de las personas y porque en realidad no tiene vida propia.